Visitando A La Tia Cass [Zero33]

 

La Tía Cass invita a su sobrino Hiro a la casa, pero lo hace mirándolo de forma seductora. Lleva un pantalón de jean muy ajustado, y ese culo luce tremendo. Es la primera vez que él viene de visita a casa después de mucho tiempo, luego de haber estado años viviendo en otra parte. Quien hace como que no recuerda el camino para poder seguir a la Tía por detrás y ver todo ese culo macizo hasta que lleguen.

La casa no ha cambiado para nada, pero también lo bien que luce la tía. Es como si no se hubiera ido porque todo está como lo recuerda. Y con eso la halaga, diciendo que los años no han pasado para ella. Lo cual hace sonrojar a la Tía Cass, que de verdad quiere saber si sigue pareciendo joven. Ella también le devuelve el cumplido, diciendo que se ha vuelto un chico muy guapo. Por lo que espera poder pasar un tiempo agradable con él mientras está de visita.

Ya en su habitación, Hiro piensa que no esperaba que la Tía Cass se pusiera tan buena. Que de solo imaginar su culo, sus pechos y todo su cuerpo, solo lo llevan a una fantasía. La cual no está tan lejos, porque ahora la tía quiere que le alcance la toalla y eso podría dar pie a algo más. Porque cuando entra al baño para alcanzarla, ella está enjabonada y muy desnuda. Y como no ha terminado de bañarse, quizás él quiera unirse a ella. Al que llama travieso, porque ha comenzado a tocarla de una manera que le encanta.

Y su pene ha crecido bastante con ella desnuda, lo que la está calentando. Así que descienden de rodillas para comerle en una mamada. Una boca que se siente genial, y una fantasía que aún no puede creer porque nunca esperaba que esta MILF finalmente se la comiera. Ver la cara de la tía con su pene dentro es lo máximo. Pero aunque para ella es un rico pene, todavía no puede venirse, tiene más planes. Mejor que guarde su leche y la acompañe a su habitación.

Allí ella lo espera con la vagina mojadita. Y como Hiro no puede aguantar más por metérsela, ella le dice que allí está para él, todita para su sobrino. Quien se lanza de lleno a meter su verga por el coño de ella; una vagina que espera por su pene. Ni él se puede creer que tenga sexo con la Tía Cass. Pero mucho menos que le muestre el culo cuando lo hace mientras la folla en cuatro patas.

Una tía que, luego de follar mucho con él, le da permiso a su sobrino para que se corra a dentro. Lo cual no desaprovecha, porque se siente muy rico venirse dentro de ella. No solo es una madura que se ve bien, el incesto también le calienta mucho al Hiro. Con esto le deja el chocho chorreando semen luego de haber terminado en su interior, y en otras partes del cuerpo también.

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