Bay Of Hypno-Beauties

Es un día muy caluroso y la familia Tendo tuvo la idea de ir a pasar el día en la playa. Se supone que Ranma se fue más temprano para encontrar un buen lugar para todos. Peor cuando Ukyo y Shampoo llegan a la playa no encuentran a Ranma, sino a alguien más, alguien que con un péndulo las hipnotiza, haciéndoles creer que son sus esclavas.

Su primera orden es que cada parte de sus cuerpos le den placer haciéndolo feliz. Y les pide que mientras busca otros trajes de baño para ellas, que se toquen los pechos.

Luego hace un comentario de que sus traseros se ven deliciosos con estos nuevos trajes de baño, a lo que ambas contestan que están preparadas para recibir su pene. Y que use sus traseros como desee. Este desagradable hombre comienza por el trasero de Shampoo, diciéndole lo muy ajustado que se siente cuando la penetra. Mientras tiene sus dedos dentro del coño de Ukyo. Y les pide que giman de placer.

Ambas esclavas le hacen un masaje de pechos en la cara.

Un rato más tarde, llegan Akane y sus hermanas, pero no encuentran a nadie en la playa, Akane protesta de que han llegado tarde, Kasumi se disculpa por demorar en preparar la comida para todos. Mientras que Nabiki dice que seguro que Ranma se ha ido con otra mujer.

Akane ve a Shampoo y a Ukyo, y se pregunta porque están allí y con esos trajes de baño tan escandalosos. A lo que ambas responden que lo usan porque su amo se los pidió.

Ukyo saca el péndulo e hipnotiza a las hermanas.

Mientras tanto, el perdido Ranma, está en su forma femenina, también hipnotizado y actuando como una esclava más.

Cuando Shampoo y Ukyo le llevan a las tres hermanas Tendo, le dicen a su amo que no importa que tan sucio y pervertido sean sus pedidos, ellas quieren cumplir todos sus deseos. Primero comienza teniendo relaciones en la reposera con Kasumi, Luego toma a Nabiki y por último a Akane, que se sienta sobre él y le dice que su virginidad es toda suya.

Pero este desagradable hombre aún tiene para más y ahora va por Ranma, que lo estaba esperando para complacer sus deseos.